sábado, 10 de noviembre de 2012

"Hay que tener los pies en el suelo y ni ganando al líder me ilusionaré"


Escrito por Lorenzo Garzón



Esteban Vigo, entrenador del Xerez, continúa firme en su objetivo, no quiere oír hablar de la palabra promoción pero sí confía en encadenar esta noche la cuarta victoria consecutiva ante el Elche, líder de la categoría. 

Para el técnico xerecista, el choque ante el primer clasificado es "importantísimo, nos encontramos en un buen momento y vamos a medir nuestra mejoría ante uno equipo que es líder por algo y que tiene serias aspiraciones, pero ha perdido en sus dos últimas salidas y a ver si podemos aprovechar esa circunstancia. Queremos la cuarta victoria seguida, a ver si es posible firmarla". 

El estado anímico de la plantilla ha cambiado de forma radical con la racha de resultados pero el técnico azulino quiere más y no se conforma. "Es lógico, yo siempre pido trabajo se esté bien o mal y este equipo debe ofrecer más cosas al margen de los resultados. Hay cosas que se han mejorado, ahora nos llegan y estamos mejor atrás, ya no encajamos tantos goles, las ocasiones del rival la pasada jornada fueron mínimas y arriba estamos más acertados, pero aún así hay que mostrar un mayor nivel de juego". 

El equipo ha sumado doce de los últimos quince puntos en juego y Esteban a estas alturas aún no sabe si "eso es un punto de inflexión, yo lo único que sé es que queda mucha Liga por delante y yo no me ilusiono. Es más, el que diga lo contrario se está equivocando. La ilusión de este equipo es lograr la salvación y hacer una buena temporada, que luego se puede hacer algo más, que a nadie le quepa la menor duda de que lo haremos. La categoría es complicada y hay que tener los pies en el suelo. El Elche está haciendo una campaña impecable y si pierde aquí, puede ceder el liderato. Cómo vamos a pensar nosotros en otros objetivos con las buenas plantillas que hay en Segunda. Aquí de lo que se trata es de hacer un buen trabajo y lo que venga, Dios dirá". 

Nunca suele dar pistas sobre el once y ayer no fue una excepción, aunque sí fue más claro que de costumbre. "No voy a repetir once. El 1-5 de la pasada jornada no me va a influir a la hora de hacer la alineación. Hay una base de equipo y sobre ella tenemos que trabajar, eso sí los que han entrado me lo han puesto complicado y de eso se trata". 

"Yo soy -añade el preparador xerecista- de los que piensan que el secreto de un buen equipo está en los suplentes. La pasada semana nadie daba un euro por nosotros por culpa de las bajas por lesión y sanción, salieron los menos habituales y realizaron un gran partido, lo bordaron. Eso es lo difícil, los que juegan están motivados, lo complicado es mantener motivados a los que no juegan. Tato no venía marcando y lleva una buena racha, Israel... Yo lo que trabajo más es eso. De la competencia, el que más se beneficia es el equipo. A mí me encanta que me lo pongan difícil". 

En cuanto a Israel, uno de los nombres propios del encuentro del pasado fin de semana, el preparador malagueño cree que "debe ser un jugador importante para nosotros. Tiene calidad para jugar en cualquier posición del ataque pero siempre y cuando ponga de su parte. Reúne condiciones porque técnicamente es muy bueno pero en el fútbol también es importante la intensidad, la tensión y la concentración. Si el cambia el chip de su cabeza en algunos aspectos, lo hará bien, no todo es estar bien colocado". 

Por último, lamentó la lesión de menisco del punta Íñigo Vélez. "Es otro palo y además se ha dañado la rodilla en la que no tenía problemas. Es un inconveniente más tenerle fuera hasta enero porque sólo tenemos a Tato y estamos pendientes de la recuperación de José Mari
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